Desinfectar frutas y verduras

Cómo desinfectar frutas y verduras

Lava y desinfecta tus frutas y verduras de forma segura, conoce algunos tips de limpieza y los desinfectantes naturales que puedes usar.

Sabemos de la importancia de incluir en nuestra alimentación las frutas y verduras al ser productos muy nutritivos considerándose así, alimentos reguladores que ayudan al buen funcionamiento de nuestro cuerpo por su alto contenido de vitaminas, minerales, fibra, entre otros.

La mayoría de las frutas, hortalizas y verduras se comen crudas por lo que es fundamental lavarlas y desinfectarlas muy bien antes de consumirlas, ya que después de ser recolectadas, pasan por un largo viaje antes de llegar a nuestras manos donde es aconsejable, lavarlas con abundante agua ya que al ser productos que vienen directamente del campo, muchos de ellos tienen contacto con tierra, abonos y en algunos casos pesticidas y agroquímicos, sin mencionar que después de su cosecha son manipulados durante sus etapas de transporte y distribución.

Según Glenda Lewis, experta en enfermedades transmitidas por alimentos de la Administración de Alimentos y Medicamentos, comenta que los productos frescos pueden estar contaminados de muchas maneras; durante la etapa de crecimiento, después de la cosecha, en el momento de la compra e incluso en el momento de su preparación por una manipulación y almacenamiento. Es por esto que con tantas fuentes de contaminación que pueden ocurrir, es muy importante desinfectar y preparar de manera segura los productos frescos antes de consumirlos.

A continuación, te contamos las recomendaciones básicas que debes seguir para lavar y desinfectar las frutas y vegetales antes de consumirlos y algunas opciones de desinfectantes naturales que puedes usar.

¿CÓMO SE DESINFECTAN LAS FRUTAS Y VERDURAS?

Las frutas y verduras sin lavar pueden ser nocivas para la salud al tener elementos que no son visibles a simple vista como bacterias y microorganismos o residuos visibles como tierra o polvo que se adhieren durante su cosecha o distribución.

Según la Agencia de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN) en el medio ambiente las frutas y vegetales están en contacto con el suelo, polvo, pesticidas y agua del riego, en donde puede haber microorganismos patógenos y elementos químicos que en ocasiones contaminan las frutas y verduras, los cuales, con un simple paso por el agua, eliminan los restos de agentes contaminantes que quedan en la piel de estos alimentos.

VEGETALES DE HOJA LISA

Quizás este tipo de alimento te tome un poco más de tiempo, ya que, para tener una limpieza y desinfección profunda, debes lavar separadamente y de forma individual las hojas de vegetales como la lechuga, espinaca, acelgas, entre otros. Lávalas bajo el chorro de agua una por una y desecha las hojas que veas deterioradas. Si piensas un poco en economizar agua, también puedes llenar un bowl con agua fría y dejarlas allí unos minutos en inmersión para remover la tierra y suciedad que estén presentes. Sécalas con servilletas o papel de cocina para eliminar el exceso de humedad y se puedan conservar frescas por un tiempo más.

FRUTAS Y VEGETALES CON CÁSCARA COMESTIBLE

Los alimentos con cáscaras comestibles y consistencia firme como las manzanas, pepinos, peras, duraznos entre otros, antes de comerlos o usarlos en una preparación, debes lavarlos directamente bajo el agua y dependiendo la cantidad de suciedad que tengan, frótalos con un cepillo suave si lo consideras necesario.

Por lo que su cáscara también se come, lo recomendado es omitir el jabón, ya que algunas superficies de frutas y vegetales son porosas y los alimentos frescos pueden absorberlos. Después del lavado, sécalas con una toalla o un paño para retirar el exceso de humedad y si los vas a almacenar, puedan conservarse en buen estado por mayor tiempo.

FRUTAS Y VERDURAS CON CÁSCARA NO COMESTIBLE

Alimentos como la piña, coco, plátanos, aguacate, limones, calabazas, melones y sandías tienen en común que deben abrirse o pelarse o para poder comerlos. A pesar de que su cáscara no se consume, también deben lavarse antes de almacenarlos o consumirlos, esto se debe a que la suciedad y las bacterias que tengan en su superficie, pueden llegar a traspasar de la cáscara al interior de a fruta, cuando se corta o se pela. Por eso en la mayoría de las ocasiones, se aconseja utilizar un cuchillo para cortar las tajadas que se saquen de la fruta o la verdura y otros diferentes para separar la pulpa de la piel.

NO LAVES LOS HONGOS

Hay quienes consideran que los hongos o setas o no se deben lavar, pero este mundo es tan amplio que en ocasiones es difícil saber cuáles sí se pueden lavar y cómo retirar los restos de tierra que quedan en algunos. Lo recomendado es no lavarlos antes de guardarlos en la nevera, ya que la humedad acelerará la rapidez con la que los hongos comienzan a deteriorarse, especialmente si se guardan en un recipiente sellado. Si la suciedad es superficial, se puede limpiar en seco retirándolo suavemente con un cepillo o una toalla de papel. Por ser alimentos porosos con cualidades superabsorbentes, se recomiendan no lavarlas, si pasan demasiado tiempo en el agua, porque al momento de cocinar con ellos y saltearlos, el agua absorbida arruinará tus comidas modificando su sabor y textura.

DESINFECTANTES QUE PUEDES UTILIZAR

Actualmente puedes encontrar en el mercado miles de productos químicos para desinfectar frutas y verduras, pero la mejor opción, es recurrir a productos económicos y que tienen las mismas propiedades de limpieza y desinfección.

VINAGRE

Uno de los mejores productos para lavar frutas y verduras es el vinagre blanco. Su poder desinfectante lo convierte en el producto ideal para limpiar cualquier tipo de alimento. Para limpiar tus frutas y verduras con este producto debes diluir un vaso de vinagre en medio litro de agua y dejar en remojo los alimentos durante 10 minutos, después del tiempo los retiras y le das un enjuague rápido.

VINAGRE, LIMÓN Y BICARBONATO

El limón por su elevada concentración de ácido cítrico tiene grandes propiedades desinfectantes y antibacterianas. El limón combinado con vinagre nos da como resultado un poderoso desinfectante natural que elimina cualquier patógeno que pueda tener las frutas y verduras. Para prepararlo, debes mezclar agua con limón, vinagre y bicarbonato. Utiliza una proporción de tres partes de agua por una de vinagre y un limón. Deja remojar las frutas y verduras durante 10 minutos y luego las enjuagas y las secas. Con esta eficaz combinación puedes lavar papas, rábanos, zanahorias y otros tipos de tubérculos.

AGUA OXIGENADA

Tal vez te suene extraño que este producto se utilice en la cocina, pero sí, es otro producto que tiene propiedades blanqueante, desinfectante y fungicida con el que podemos limpiar y desinfectar las verduras y hortalizas que tienden a crear hongos, como es el caso de los tomates. Si vas a utilizar este producto, ten cuidado de diluir la cantidad necesaria. Utiliza solo 10 ml por cada 250 ml de agua. Deja remojar los alimentos por unos minutos e inmediatamente los enjuagas con abundante agua.

LIMPIA Y DESINFECTA LAS SUPERFICIES DE LA COCINA

Procura mantener en casa un ambiente de buena limpieza, no basta con solo lavar las frutas y verduras, también es importante contemplar la limpieza básica en las áreas donde se mantienen y se preparan los alimentos. Según los expertos en higiene alimentaria, las superficies de la cocina deben ser limpiadas y desinfectadas constantemente al quedar residuos de comida atrapados en lugares como esquinas o grietas, los cuales con el paso del tiempo se convierten en lugares insalubres al ser fuente de propagación de organismos nocivos para los alimentos y la salud de las personas y en ocasiones se debe recurrir al uso de productos químicos para ayudarnos a mantener y controlar las plagas.

NO OLVIDES LOS UTENSILIOS

Algunos utensilios de uso frecuente requieren una desinfección profunda como las tablas de picar y los cuchillos. A la hora de cortar verduras, evita la contaminación cruzada en preparaciones donde cortas carne cruda, frutas y verduras en la misma superficie y con los mismos implementos. Esto es con el objetivo de disminuir la probabilidad de contaminación cruzada y generar una transferencia microbiana.

4 ASPECTOS PARA TENER EN CUENTA

  1. Debido a que muchas frutas y verduras son porosas y todo lo que entre en contacto con su exterior se filtra a su interior, no los laves con el jabón que usas en tu lavavajillas.
  2. Se recomienda no usar agua caliente para lavarlos, algunas hojas de vegetales son delicadas, por lo que es mejor lavarlos o enjuagarlos siempre con agua fría.
  3. Tómate el tiempo de quitar las hojas dañadas o marchitas que en ocasiones pueden albergar bacterias, acelerando el deterioro de todo el alimento.
  4. Si después de lavar tus frutas y verduras no vas a consumirlos al instante, sécalos muy bien ya que la humedad es un ambiente perfecto para la proliferación de bacterias, que aunque algunas no sean peligrosas, si pueden acelerar el proceso de descomposición del alimento.